Hemos revisado los resultados del Barómetro de la Política CERC - MORI 1987 - 2023, donde se informa que el 36% de las personas encuestadas cree que las Fuerzas Armadas tuvieron razón al llevar a cabo el golpe de Estado. Esto significa que más de un tercio encuentra justificación para el quiebre institucional ocurrido en septiembre de 1973.

Nos preocupa esta respuesta, especialmente porque este año se conmemoran 50 años desde la interrupción de la democracia. Para aquellos que nacieron después de 1990, nuestro sistema republicano actual puede parecerles uno más entre tantos, con la capacidad de mejorar los niveles de bienestar o, peor aún, puede presentárseles como un obstáculo para sus aspiraciones.

Sin embargo, la democracia es uno de los pilares fundamentales del Estado de Derecho y no hay ninguna razón que justifique su interrupción. La independencia de los poderes del Estado y el respeto de los derechos humanos son los cimientos esenciales de la democracia. No existe otro sistema de gobierno que proteja mejor las garantías de todas las personas.

Esta cifra que nos revela el estudio de opinión debe servirnos como una lección. Nos indica que quizás estamos fallando al transmitir el mensaje adecuado a aquellos que residen en el país, especialmente a aquellos que no experimentaron de forma cotidiana la violencia y las violaciones que se volvieron habituales durante la dictadura.

Los derechos de las personas enfrentan diversas amenazas en el mundo contemporáneo. Su protección requiere de condiciones de seguridad que solo se pueden consolidar en democracia. No hay razón que justifique alejarnos de un camino en el cual ya hemos logrado avances tan relevantes para el bienestar de todos los que viven en Chile.